domingo, 9 de febrero de 2014

PÓNMELO DIFÍCIL

Haz que me duela el alma de lucharte,
que me despeine hasta la sonrisa
de andar contra corriente.
Ponme la vida difícil destino,
que me sobran ganas para ganarte

Que la lucha sea encarnizada
y ahoguemos el vomito en las trincheras,
que las camas estén vacías,
los viajes sin acompañantes
y los poemas me sepan a derrota.
Haz que cada paso signifique una montaña,
que ser sensible sea sinónimo de ser fuerte.

Pégame en los costados los dolores,
hazme cargar con los pesos de no verte,
juega a no darme nada, a esconderme todo,
ponme a prueba cada mañana
que no pienso dejar de levantarme con el pie izquierdo.

Sácame los colores, oblígame a mentir.
Consigue callarme los labios, enfría el corazón,
que cada sueño tenga 14 pesadillas
que cada dos minutos, tres me cuesten la vida.

Para vivir despreocupado ya me quedará tiempo,
que el llanto no da miedo, que la lágrima sabe a salado,
que la soledad es un castigo solo para el que no la ha sufrido,
que la compañía, cinco de cada cuatro veces tiene fallos.

Juégame las veranos con ases en la manga
que a mi nada ni nadie me hunde los inviernos.

Que nadie me lea cuando escriba,
que no tenga suerte en nada.
Ciérrame las puertas de las redacciones,
que en las buenas siempre hay ventanas
y el periodismo se vive en las calles.

Seré un Quijote al modo sacrílego,
no tendré ni montura, ni armadura.
Dame poca vida en las esquinas,
que nadie me dedicó nunca la suya.

Pónmelo difícil destino,
que me sobran motivos para creer,
que puedo ganarte.

1 comentario: